25 abril 2011

San Martin de los Andes, Patagonia, Argentina.

Existe un lugar al que siempre vuelvo en busca de los recuerdos de una feliz infancia vivida bajo un cielo en donde las estrellas pueden tocarse con la mano, en donde recorrer a caballo las laderas de sus montañas  y cruzar arroyos con agua de deshielo era cosa de todos los días, San Martin de los Andes, mi lugar en el mundo...acabo de volver de uno de mis tantos viajes a este paraiso perdido entre lagos y montañas y como cada vez que vuelvo algo en mi cambia y me inspira a comenzar coasa nuevas, así nace este diario de una curiosa incansable...en donde pretendo subir o documentar todo lo que me interese o llame mi atención, si alguna persona decide acompañarme , entonces feliz sigo mi recorrido..


Plaza Sarmiento,plagada de rosales, y araucarias y una pérgola para refugiarse y disfrutar del entorno
El antiguo Hotel Lacar frente a la plaza, hoy convertido en locales comerciales, te recomiendo  Oveja Negra, en donde podés encontrar botas y tejidos diseñados por artesanos del lugar.
Un clásico al mediodia Dublin resto bar en la esquina de Mariano Moreno y San Martin, una rica ensalada de trucha ahumada, hojas verdes, palta y timbal de remolachas era mi almuerzo preferido, luego un café, marquise de chcolate y cítricos o cheese cake  de frutos rojos..no se lo pierdan.
Si se cruzan luego del almuerzo en Dublin, los mejores chocolates de la zona, Mamusia , bombones rellenos de frutos, licores y dulce de leche, chocolates en rama o las tradicionales barritas de chocolate rellenas con infinidad de mousses, cremas o frutos secos.

Luego seguí caminado hacia el lago y sentate en el muelle a contemplar es paisaje maravilloso o hacé un paseo en lancha a Quila Quina un viaje de 30 minutos te acerca a esta playa en donde hay un restaurant sobre el muelle, recorré esta villa caminando y podés llegar hasta la casacada, un lugar de ensueño.
El viaje a la villa podés hacerlo por tierra y te aseguro que nunca te vas a olvidar de su camino sinuoso entre bosques y precipicios...
Al regreso tomás la ruta y lleg\as al Cerro Chapelco, centro internacional de esqui', sus pistasentre  bosques de lengas son codiciadas por los amantes de este deporte.

Con Jaime Bravo, el mejor instructor de esqui del cerro, no solo vas a aprender a esquiar sino que te vas a divertir muchísimo con su inmejorable sentido del humor y calidez.